lunes, 10 de diciembre de 2007

Queridos Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

Como viene siendo tradicional, me remito a sus Majestades en los albores de 2008 para relatarles el estado de mi comportamiento en durante los últimos 12 meses que han pasado desde mi última misiva.

Habrán podido comprobar sus altezas reales que mis acciones durante los pasados 365 días han resultado bastante ejemplares, hasta el punto de que mis progenitores (padres, vamos) han llegado a resaltar mi buen comportamiento y trato con los demás -comparándolo, aunque sea una acción "odiosa", tal y como dice el refrán popular, con el de mi hermano, al que ruego no le tengan mucho en cuenta cómo ha sido este año-.

Además de continuar con mi trabajo arduo y sin descanso (llegué a trabajar el día de la Madre, incluso, sin que este hecho mermara mi presencia en tan especial día), he comenzado, desde hace unos meses, a compartir mi vida con otro ser humano, de raza canina, con la que mi relación -es una hembra de boxer, llamada Nooka- ejemplifica mi labor desinteresada por el cuidado del resto de especies en general.

No quisiera con esta carta detallar en exceso mis acciones del día a día, porque sus majestades las conocen a la perfección (sé de buena tinta que observan día a día a todos los niños y jóvenes españoles para conocer de primera mano su comportamiento para con los demás y, de este modo, compensar sus actitudes responsables y reprobar sus actos negativos). Esta carta de un humilde creyente en sus altezas reales, en estos tiempos de escepticismo y "falsos ídolos", para reafirmar, un año más, mi ilusión en estas fechas navideñas.

Asimismo, con la misiva de este año sólo me gustaría la gente a la que quiero, y que ha sufrido y sufre mucho durante este 2007 que, gracias a Dios ya se acaba, pueda encontrar un poco de tranquilidad y paz, para que el próximo año lo comiencen con nuevos ánimos para afrontar todo lo bueno que, seguro, les llegará -algo que querría poder decirles en persona, pero que quizá, de sus reales bocas, tenga un efecto más positivo-.

Sin embargo, y como sé que sus majestades se encuentran muy ocupados durante este mes, me gustaría, de paso, facilitarles el trabajo, por lo que poco a poco, incluiré una lista de algunos deseos meteriales para que sus altezas reales dejen, si creen posible y conveniente, en mi hogar familiar, el de La Cañada, en Valencia, en el día que cumplen las ilusiones de todos los que se lo merecen en estas fechas.

Sin otro particular, me gustaría despedir mi inicio de este año con un afecutoso saludo para cada uno de los tres Reyes y desearles que su trabajo no tenga muchas complicaciones el próximo día 6 de enero de 2008 y en los días precedentes, que ya saben sus majestades cómo se pone Valencia por estas fechas.

Muchas gracias por tomarse su tiempo en leer mi humilde carta

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Sólo por ser un chico trabajador que acepta compartir su vida con una boxer te mereces todas las atenciones de sus majestades los Reyes Magos... te lo dice la voz de la experiencia, que cuidar de esos bichos tan adorables te hace ganarte el cielo!

Besitos

Jorge dijo...

Vives con un tipo de calzoncillo que se llama Nooka? Me has recordado a mi hermano por la forma de expresarte, que habla así cuando llaman a casa, aunque sea una sudamericana pidiendo que te cambies a Jazztell.

¿2008? ¡Qué lejoh!